ARTICULO:
Critica de película
La relación entre Amor Sin Barreras y Andrés
Caicedo
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Afiche de Amor Sin Barreras (West Side Story) Poster Oficial por The
Mirisch corporation
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Cuando decimos Andrés Caicedo,
pensamos en un joven escritor caleño que nos brindó con su peculiar forma de
escribir un pedazo de su ciudad literaria. De la misma forma que Gabriel
García Márquez nos abrió las puertas de Macondo, Caicedo nos abrió las puertas
de la sucursal del cielo, la ciudad que lo acogió y lo vio brillar en su época.
A medida que uno lee a Caicedo se va dando cuenta de la importancia que tenía
Cali para él. No solo era una ciudad, era su fuente de inspiración. “Maldita sea, Cali es una ciudad que espera
pero que no le abre las puertas a los desesperados”.
Caicedo antes que escritor era un
cinéfilo empedernido. Veía ocho películas o más diarias, escribía reseñas de
estas. De hecho su amor por este lo llevo a fundar junto con Luis Ospina y
Carlos Mayolo el Cineclub de Cali, además lanzó la revista Ojo al cine. Viajó
hasta Hollywood buscando al director Roger Corman para venderle dos de sus
guiones. Su entrañable amigo Luis Ospina dice que Caicedo no pasaba un solo
momento de sus días sin pensar en cine.
En sus historias usualmente vemos
un rastro de las películas que lo marcaron. Pues estas lograron tocar sus más
sensibles fibras artísticas dejándolo con ganas de más. Entre esas esta Rebeldes
Sin Causa, West Side Story, y muchas otras, las cuales tienen una relación
con la Cali descrita por Caicedo.
La relación entre Caicedo y el cine es mucho más
profunda, el vínculo va más allá de ir al teatro y ver la película. Él se
conectaba con cada historia, la sentía, incluso se la representaba a sus
amigos. Cada historia era emocionante, fascinante, lograba cautivarlo. Su
adoración y devoción por el séptimo arte perdurará siempre. Todas estas
historias que presentaban en el cine, se desarrollaban a la
escala de Cali.
En este texto expositivo voy a
hablarles sobre West Side Story, mejor conocida en español bajo el
título de Amor sin barreras. Este film fue producido
por Robert Wise Jerome Robbins en 1961 pertenece al
género de comedia musical. Está basada en
la historia de Romeo y Julieta, de W. Shakespeare, pero
adaptada a los tiempos modernos. En Nueva York, dos bandas de
jóvenes los Sharks, inmigrantes puertorriqueños y los Jets,
estadounidenses de origen irlandés, son rivales y viven en disputas. El
conflicto surge cuando María, hermana del jefe de la pandilla puertorriqueña,
Bernardo, y Tony un ex miembro de los Jets, se enamoran. Como en el
libro de W. Shakespeare, las dos bandas acaban solucionando
sus disputas con la muerte de los enamorados, en este caso solo muere Tony a
manos de Chino, el pretendiente de María. Teniendo esto en mente pensemos en
una o varias historias de Caicedo con que relacionarla. En mi
opinión, sería Patricialinda pero antes de saltar a conclusiones les
explico por qué.
Por una parte, Amor sin barreras es un film dual, contradictorio: los
bailes son peleas, las peleas son bailes, la inmensidad es íntima, las
canciones son política, la oscuridad puede ser acogedora y la luz peligrosa,
los nativos son inmigrantes, los inmigrantes americanos, el silencio también es
música, tragedia y comedia. Las dos caras de la moneda en la misma pantalla. Un
film hermoso y duro. Sin duda imprescindible. Igualmente Patricialinda muestra
una Cali azotada por la época de la violencia, situándonos en el periodo de la
muerte de Gaitán, esto es lo que el personaje que narra la historia nos cuenta,
desde su niñez se la pasó escuchando historias sobre el asesinato de Jorge
Eliecer Gaitán a manos de los conservadores, bando al que pertenecía su familia.
De igual forma, la película muestra la oposición de los dos bandos, los Sharks y
los Jets. Lo que sería en Cali, conservadores y liberales. La
violencia está presente tanto en el cuento como en la película. Lo cierto es
que esas dos partes, los Liberales y Conservadores, en el caso del cuento y
los Jets y los Sharks en el caso de la película se
abrazan a la perfección en este musical clásico, pero atípico. Digo esto porque
un género tan almibarado como el musical nunca fue el territorio propicio para
digresiones sociales, y aunque la conocida historia de amor entre Tony y María
es el hilo conductor de esta historia. Sin embargo, el protagonismo principal
es todo ese marco violento en el que se desarrolla esta. Conociendo el
contexto de Cali, esta película encaja perfectamente. Lo que quiero decir con
esto es, Cali en la epoca de Caicedo era azotada por diferentes bandas o
galladas las cuales se peleaban por un sector o un esquina o simplemente tenían
ganas de causar un alboroto como lo era en el caso de los Sharks o los Jets.
Segundo, el amorío con Patricialinda. Esta no es una relación normal y
nos damos cuenta de eso a lo largo del cuento, al narrador le surgen
preguntas como: ¿Qué tal si mato a Patricilinda? Y cosas así lo cual me hace
pensar en la muere de los enamorados también la importancia de los dos bandos.
La mujer misteriosa por la cual él tiene sentimientos parece haberlo
rechazado, al igual que María hizo con el llamado chino dejando como
consecuencia la muerte de su amante Tony.
Para finalizar, las dos historias tienen en común la violencia y el
destino trágico de los amantes. En Patricialinda, Caicedo nos mostró la Cali de
esa época y la película le hizo juicio a la situación, a pesar de que no era en
la misma ciudad, ni las mismas personas. La relación entre estas dos cautivó al
público y le mostró la situación y la
verdad.
Folleto de ojo al cine, revista critica de Caicedo y sus amigos |
La importancia del cine para
Caicedo era demasiada. Era tradición para él ir a cine y contar, comentar y
criticar la película. Dejando esto como resultado una fuerte relación entre sus
historias y el cine y sobre todo un legado para las próximas generaciones.
“Si
dejas obra, mueres tranquilo, confiando en unos pocos buenos amigos”.
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